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Laura y Clare Vaizey estudian en un internado. Nunca han sabido lo que es el amor familiar y han aprendido a valerse por sí mismas, pero cuando su padre muere,
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Laura y Clare Vaizey estudian en un internado. Nunca han sabido lo que es el amor familiar y han aprendido a valerse por sí mismas, pero cuando su padre muere, la ausencia se convierte en un problema real. La madre las saca del colegio para que se encarguen de cuidarla, iniciando un proceso de anulación, en el que las hermanas aprenden que la mejor manera de sobrevivir es en silencio. Cualquier ambición queda descartada, de modo que cuando Felix Shaw, el jefe de Laura, le propone matrimonio, ella acepta sin más, dando por hecho que también se ocupará de Clare. El carácter rastrero y ruin del nuevo marido empieza a mostrarse de inmediato, pero de una manera ambigua. Shaw carece de empatía, y disfruta humillando y aislando a las hermanas hasta hacerse con el control de la casa y de sus vidas. Eso sí: la violencia nunca es evidente. Los chantajes, la imposición de una culpa que no es y el menosprecio constante se muestran bajo una pátina de normalidad, lo que hace que todo resulte mucho más terrible.«La torre vigía» constituye un retrato incisivo e hipnótico sobre el miedo y el poder que tiene para atenazar a sus víctimas hasta despojarlas de su capacidad para huir.